Volver a aquel Hotel?
Pues si. El pasado Domingo 2 de octubre volvió a las ondas el circo de Hotel Blues. Fue una vuelta a clase sin sorpresas. Esto, según se mire es bueno o malo.
Me explico. En el Hall del Hotel nos reunimos a la misma hora de siempre los de casi siempre. Es decir, allí estaban Montse Cuberes con sus botoncitos y sus palanquitas, el Chino, con su dobro; Dragone, con sus ... bueno, Dragone, y un servidor, con su atractivo sexual desmesurado, su enorme sapiencia en multiples aspectos de la vida, su don de gentes, y su ecuanimidad y magnamicismo. Más tarde, lamentablemente, se unió telefónicamente, desde las cloacas de la información, nuestro despreciado becario, Adhuc.
Eso quiere decir que las cosas no han cambiado mucho en el Hotel. Igor sigue sin brazo, Fraü Helga sigue cocinando de manera espantosa, y Hans sigue manteniendo (o imponiendo) la ley y el orden en el Hotel a su manera.
Y que todo siga igual significa también que el Hotel no ha evolucionado. Así como en otros programas de otros medios cada temporada se renuevan, amplían o modifican secciones o colaboradores, en el Hotel Blues no se cambian ni las sábanas. Y creanme cuando les digo que me gustaría que ciertos aspectos cambiaran o cambiasen. Ya que si se han fijado, los presentes en el Hall del Hotel éramos los que éramos. Ni más, ni menos. Alguno se preguntará dónde estaba el Tío de América, un servidor también. Alguno se preguntará donde estaba don Felipe Gil, el "hacker" del Hotel. Un servidor, también. Los colaboradores, que en otros programas suelen ser la salsa, el desengrasante, el aire fresco, la constancia o el trabajo duro que saca adelante el programa, en el caso del Hotel no es así.
Llegados a este punto, puedo decir, que el otrora lustroso y flamante Hotel Blues, se parece más a Can Pixa y rellisca, que a cualquier otra cosa.
Tenemos un becario con déficit de desarrollo mental, que se viene arriba y reclama más tiempo en "su" programa. Cuando ni en un hipotético caso de cataclismo mundial, si el único superviviente del mundo junto con Adhuc se topara desgraciadamente con este, ni aun así se molestaría este pobre desgraciado en escucharle.
Por otro lado tenemos a mi tío, si, "el Tío de America". Un viejo con cuatro pelos crepados y mallas agujereadas, que vive por la patilla en la mejor habitación del Hotel, que tiene constantes problemas con la justicia, que consume todo tipo de substancias, que monta emisoras clandestinas dentro del Hotel, que llena su habitación de mujeres con los labios muy pintados y que desaparece constantemente sin previo aviso. Pero que extrañamente, despierta un sentimiento de ternura hacia su persona por parte del resto de huespedes del hotel, ante el estupor y la deses peración de su sobrino y director del complejo hotelero, un servidor.
Y el otro, el hombre de internet, don Felipe Gil, el "hombre elegante", el hombre serio, cumplidor ... Je! Siempre tiene alguna excusa, tan pronto su mujer está embarazada, como que tiene que ensayar con algun grupito de esos de rock, como que si su amigo no tiene cuello, como que si la abuela fuma, etc...
Pero bueno. Cada uno recoge lo que siembra. Y yo debí de sembrar semillas de ñorda.
Bien, el contenido del programa se compuso en esta ocasión de un repaso a lo que había dado de si el verano. Conciertos que habían despertado el interés delos miembros del hotel, novedades discográficas y un triste repaso al obituario estival.
Se habló del desastre del Katrina y su relación directa con musicos como Fats Domino o Dr. John. Las muertes de Clarence Gatemouth Brown o R.L.Burnside. Los estrenos discográficos de Eric Clapton, Tinsley Ellis, The Rolling Stones, Cafe R&B o Studebaker John. Y se habló de los conciertos de Rod Stewart y Taj Mahal con Robert Cray.
Para el domingo que viene parece que el programa arrancará con una novedad que quedó en el tintero, el nuevo álbum de Los Deltonos "GT". Según el director, un pedazo de álbum.
El resto? quien sabe.
Lo único seguro es que habrá blues, rock y una panda de mercenarios deslenguados elevando la temperatura de las noches de los domingos.
OOOHHH! YEEEEEAH!!!!
Arnau Serra.
Director.
Me explico. En el Hall del Hotel nos reunimos a la misma hora de siempre los de casi siempre. Es decir, allí estaban Montse Cuberes con sus botoncitos y sus palanquitas, el Chino, con su dobro; Dragone, con sus ... bueno, Dragone, y un servidor, con su atractivo sexual desmesurado, su enorme sapiencia en multiples aspectos de la vida, su don de gentes, y su ecuanimidad y magnamicismo. Más tarde, lamentablemente, se unió telefónicamente, desde las cloacas de la información, nuestro despreciado becario, Adhuc.
Eso quiere decir que las cosas no han cambiado mucho en el Hotel. Igor sigue sin brazo, Fraü Helga sigue cocinando de manera espantosa, y Hans sigue manteniendo (o imponiendo) la ley y el orden en el Hotel a su manera.
Y que todo siga igual significa también que el Hotel no ha evolucionado. Así como en otros programas de otros medios cada temporada se renuevan, amplían o modifican secciones o colaboradores, en el Hotel Blues no se cambian ni las sábanas. Y creanme cuando les digo que me gustaría que ciertos aspectos cambiaran o cambiasen. Ya que si se han fijado, los presentes en el Hall del Hotel éramos los que éramos. Ni más, ni menos. Alguno se preguntará dónde estaba el Tío de América, un servidor también. Alguno se preguntará donde estaba don Felipe Gil, el "hacker" del Hotel. Un servidor, también. Los colaboradores, que en otros programas suelen ser la salsa, el desengrasante, el aire fresco, la constancia o el trabajo duro que saca adelante el programa, en el caso del Hotel no es así.
Llegados a este punto, puedo decir, que el otrora lustroso y flamante Hotel Blues, se parece más a Can Pixa y rellisca, que a cualquier otra cosa.
Tenemos un becario con déficit de desarrollo mental, que se viene arriba y reclama más tiempo en "su" programa. Cuando ni en un hipotético caso de cataclismo mundial, si el único superviviente del mundo junto con Adhuc se topara desgraciadamente con este, ni aun así se molestaría este pobre desgraciado en escucharle.
Por otro lado tenemos a mi tío, si, "el Tío de America". Un viejo con cuatro pelos crepados y mallas agujereadas, que vive por la patilla en la mejor habitación del Hotel, que tiene constantes problemas con la justicia, que consume todo tipo de substancias, que monta emisoras clandestinas dentro del Hotel, que llena su habitación de mujeres con los labios muy pintados y que desaparece constantemente sin previo aviso. Pero que extrañamente, despierta un sentimiento de ternura hacia su persona por parte del resto de huespedes del hotel, ante el estupor y la deses peración de su sobrino y director del complejo hotelero, un servidor.
Y el otro, el hombre de internet, don Felipe Gil, el "hombre elegante", el hombre serio, cumplidor ... Je! Siempre tiene alguna excusa, tan pronto su mujer está embarazada, como que tiene que ensayar con algun grupito de esos de rock, como que si su amigo no tiene cuello, como que si la abuela fuma, etc...
Pero bueno. Cada uno recoge lo que siembra. Y yo debí de sembrar semillas de ñorda.
Bien, el contenido del programa se compuso en esta ocasión de un repaso a lo que había dado de si el verano. Conciertos que habían despertado el interés delos miembros del hotel, novedades discográficas y un triste repaso al obituario estival.
Se habló del desastre del Katrina y su relación directa con musicos como Fats Domino o Dr. John. Las muertes de Clarence Gatemouth Brown o R.L.Burnside. Los estrenos discográficos de Eric Clapton, Tinsley Ellis, The Rolling Stones, Cafe R&B o Studebaker John. Y se habló de los conciertos de Rod Stewart y Taj Mahal con Robert Cray.
Para el domingo que viene parece que el programa arrancará con una novedad que quedó en el tintero, el nuevo álbum de Los Deltonos "GT". Según el director, un pedazo de álbum.
El resto? quien sabe.
Lo único seguro es que habrá blues, rock y una panda de mercenarios deslenguados elevando la temperatura de las noches de los domingos.
OOOHHH! YEEEEEAH!!!!
Arnau Serra.
Director.
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